Ya está. Ya ha pasado esa primera noche que tantísimo miedo me daba y aunque ha sido duro, ha ido mucho mejor de lo que me esperaba. Por suerte, cuento con maridín que es un padrazo excelente y ambos formamos un equipo extraordinario.
Después de que Bichito cenase, le ofrecí teta en el sofá. Seguí diciéndole que durante la noche no vería a la teta porque se iba a dormir a otra parte y que se despidiese de ella. Él solo se separó en ese mismo instante, le dio un besito, le dijo adiós con la mano y me tapó con la camiseta.
Cuando estuvo un poco más cansado, allá sobre las 21h, maridín se lo bajó a la calle en el carro para dormirlo. Esto será algo que más adelante habrá que cambiar, pero vayamos poco a poco.
Yo estaba acojonada, no te voy a engañar. Tenía todo el tiempo como el estómago revuelto porque no sabía qué iba a pasar ni cómo iba a transcurrir todo.
A las 21:30 maridín ya estaba en casa con Bichito dormido, lo llevó a nuestra habitación y pudimos cenar. Vimos hasta una peli. Contábamos con la ventaja de que Bichito estaba echo polvo del fin de semana de playa y una de las veces que se despertó en el carro, volvió a dormirse solo.
A las 23:45h nos fuimos a dormir y coincidió que Bichito se despertaba por primera vez. Yo desterrada en la habitación del fondo y con la puerta cerrada, escuchaba a Bichito llorar.
Quería ir corriendo, cogerlo en brazos y darle teta, pero sabía que si lo hacía me arrepentiría y enseguida volvería a darme el agitamiento. Aguanté con mi dolor de barriga como pude y entonces, se hizo el silencio.
Me costó mucho dormirme e igualmente me desperté cada hora con los llantos de Bichito. Una amiga me dijo que me pusiese tapones y no le hice caso, pero hubiese sido lo suyo. Se despertó a la 1:15h, a las 2:20h, a las 3:45h y a las 4:45h. Y a las 5h, apareció maridín por la puerta.
Antes de irnos a dormir acordamos que de madrugada cambiaríamos el sitio para que él pudiese descansar al menos un par de horitas seguidas y además, yo sabía que tendría las tetas a reventar. Y así era. Le pregunté a maridín si había tenido que acunarlo mucho y me dijo que ¡no se tuvo que levantar de la cama ni una vez!
Que empezaba a llorar, que llamaba a la teta o a mamá indistintamente y él le decía que mamá no estaba y la teta tampoco, que si quería había agua (a lo que Bichito respondía NOOOOOO) y enseguida, se quedaba durmiendo otra vez.
No llegó a estar más de 5 minutos berreando y eso es lo que a mí más feliz me ha hecho. ¿Que lo ha pasado mal? Sí, pero aparentemente solo 5 minutos cada vez y no largas horas.
A las 5:30h, ya conmigo en la cama, se ha vuelto a despertar y he intentado hacer lo mismo que maridín, sin éxito. El peque me ha detectado y se ha acercado a mi teta como si no hubiese un mañana.
Lo he agradecido porque en ese punto yo ya estaba con las tetas como piedras y me dolían bastante. Ha mamado durante 5 minutos, se ha dado la vuelta y ha seguido durmiendo.
Hasta las 7h que me he levantado, ha mamado 3 veces más (dos de cada teta) durante un par de minutos. Me ha parecido más una comprobación de que yo estaba ahí que otra cosa.
Él no se ha despertado hasta las 8h y porque he empezado a hacer ruido, aún así, hemos llegado tarde a todas partes hoy. ¿Lo mejor? Su sonrisa al verme esta mañana. Se ha puesto de pie en la cama y me ha abrazado con un ímpetu que me ha quitado todos los males de encima.
A pesar de todo, no me odia. Eso era lo que más miedo me daba.
Esta noche nos enfrentamos a la segunda noche, a ver qué tal se da. ¿Cómo fue vuestra segunda noche? ¿Mejor que la primera? ¿Peor?
6 Comentarios
miren | de lunares y lunas
10 julio, 2017 at 10:48 am¿ves cómo iba a ser mejor de lo que pensabas? y claro que no te odia, ¡no pienses eso! verás como en unos días se acostumbra con toda la naturalidad del mundo. por cierto, yo intentaría evitar lo de los paseos en sillita, porque como lo coja de rutina, que son expertos en eso, ¡luego tendréis que hacer nu nuevo “destete” de eso! ánimo y a por la segunda noche
Mamunski
10 julio, 2017 at 4:01 pmOleeeee!!!!! Yo no te puedo contar nada por experiencia propia porque aún no la tengo, pero me alegro de que haya ido mejor de lo que pensabas, a ver si sigue así. Un beso!
Isa
10 julio, 2017 at 4:08 pmQué guay, Laura! Lo primero que he hecho hoy al despertarme ha sido mirar instagram para ver cómo os había ido. A ver si sigue la cosa así de bien.
Por cierto, tengo una pregunta que no está relacionada con el destete, sino con el colecho: escribes que mientras tú y maridín cenabais Bichito estaba durmiendo… en vuestra cama? No se cae de ella? Es que nosotros tb practicamos colecho y claro, si ella se duerme yo a la cama con ella por miedo a que en una de éstas se despierte y se caiga.
Y lo dicho, muchísimo ánimo a los dos. Seguiré el proceso atentamente. Me interesa muchísimo.
diariodeunamadreingeniera
10 julio, 2017 at 4:56 pmCuando cenábamos él seguía en el carro, pero si duerme solo en la cama (alguna vez que después de la teta me he levantado), tenemos la cama pegada a la pared por un lado y por el otro la cuna abierta para que sirva de extensión. Cuando era bebé ya compramos una barandilla porque yo me sentía más cómoda también
Luli Lulita
10 julio, 2017 at 4:11 pmRenacuajo dejó la lactancia él solo porque quiso, así que no lo tuve que destetar yo, y ahora con Ranita, pues mis noches son similares a las tuyas, pero por ahora, no me planteo destetarla, ya lo intentaré en un futuro, aún no tiene ni el año.
nuevemesesyundiadespues
16 julio, 2017 at 5:25 pmSiempre son las cosas mejor de lo que esperábamos jejeje. Me alegro mucho. He leído los días siguientes ya y veo que va fetén el método padre. Hazle la ola a tu maromo de mi parte. Un besote y que siga todo evolucionando genial.