Antes de ser madre tenía muy claro que si tenía un hijo, haríamos muchas cosas en familia.
En ocasiones, el presupuesto no nos permite hacer todo lo que nos gustaría, pero siempre hay actividades gratuitas que se pueden hacer con tal de pasar un día diferente fuera de casa.
Hoy te propongo dos planes que te sacarán de casa sin que lo notes en el bolsillo.
Hacía tiempo que tenía ganas de visitar los jardines de Joan Brossa porque los había visto en varias guías típicas de “qué hacer con niños en Barcelona”. Lo que pasa es que al estar en Montjuïc, visitarlo supone un gran esfuerzo si utilizas el transporte público o un pensamiento para coger el coche.
Decidimos ir un sábado tarde en el que no teníamos ningún plan.
Estos jardines eran el antiguo parque de atracciones de Barcelona, por lo que tienen cierto valor histórico. No obstante, dentro de los jardines no parece que ahí hubiese habido nada anteriormente, al contrario. Parece que te transporte al campo y estés lejos de la ciudad.
Los jardines tienen varios niveles siguiendo la naturaleza de la montaña de Montjuïc y según su mapa de la entrada, hay 3 parques infantiles.
Nosotros sólo encontramos 2 y ninguno habilitado para niños tan pequeños como Bichito. Aún así, eso no nos impidió pasarlo genial, pues nos subíamos con él y ya está.
Desde dentro de los jardines se puede ver pasar el teleférico de Montjuïc. Una de las cosas que te recuerda que sigues estando en Barcelona.
En general, la visita estuvo genial y dado que Bichito es un culo inquieto, podía corretear tranquilamente.
A mi parecer, es un lugar ideal para llevarse la merienda y hacer un picnic o bien ir a buscar hojas y piñas para hacer una manualidad 🙂
Al día siguiente, domingo, queríamos ir a visitar un museo.
Por norma general, casi todos los museos son gratis el primer domingo de cada mes durante todo el día, pero además, algunos de estos museos son gratis TODOS LOS DOMINGOS a partir de las 15h.
Hacía mucho tiempo que queríamos visitar el Museu Blau y decidimos que sería nuestro plan para el domingo tarde.
Llegamos allí a las 16:15h y a tiempo para inscribir a Bichito a una actividad gratuita para niños. Dijimos que sí, y aunque solo podía entrar un adulto, nos apetecía que Bichito experimentase cosas diferentes.
La actividad empezaba a las 16:30h, así que la hicimos antes de ver el museo.
Consistía en estar dentro de una habitación que estaba llena de cosas que se podían encontrar en la naturaleza. Los niños podrían tocar y ver de cerca cualquiera de estas cosas.
Había arena con estrellas de mar secas, un árbol al que se le veían las raíces, minerales, pieles de animales, insectos disecados, etc.
Bichito estaba alucinando y se pasó los 30 minutos que duraba la actividad de un sitio a otro. Al final, me derretía viendo como intentaba mirar una pluma con lupa.
Después vimos el museo y aunque con un niño pequeño la cosa es bastante difícil, nos gustó muchísimo la visita.
En la exposición se puede ver todo el recorrido de la naturaleza desde el Big Bang. A mí me encantan este tipo de cosas así que no descarto volver un día sin niño, ¡jaja! 😉
Al salir del museo fuimos un rato al parque infantil que hay ahí mismo en el Fórum y acabamos de pasar la tarde.
Me quede muy satisfecha de ese gran fin de semana que pasamos haciendo cosas estimulantes con Bichito y fuera de casa. Nos gustó tanto, que ahora tenemos mono de más.
¿Querrás saber cuál es nuestro siguiente plan? ¿Qué planes tienes para este fin de semana?